Estamos a unas horas de celebrar Halloween, una festividad realmente divertida y llena de emociones, risas, sustos, y olores únicos de esta época.
El 31 de octubre, en todo el mundo festejamos Halloween, ya sea disfrazados, viendo películas, pidiendo dulces o alguna otra manera que conozcas, esta, sin duda es una celebración que muchos esperamos a lo largo del año.
En México, muchas persona están en contra de esta celebración, pues piensan que deberíamos celebrar solo nuestras costumbres. Lo cual, no comparto jamás, pues todos somos partes de un mundo lleno de celebraciones distintas, que hemos ido adquiriendo a lo largo de nuestra historia en este planeta. Un claro ejemplo es LA NAVIDAD, festejo que se celebra en México, y que no es de raíces mexicanas.
Una vez aclarado esto, pasemos a lo realmente importante.
¿Cómo surgió el Halloween?
Primero, hay que remontarnos a la antiguedad, a los Pueblos celtas. Ellos habitaron algunas partes de Europa entre los años 1200 a.C. al 400 a.C., lugares ahora conocidos como Irlanda, Inglaterra, Escocia y Francia.
Los antiguos pueblos celtas solían realizar una gran
ceremonia para conmemorar “el final de la cosecha”. Esta celebración ocurría a
finales de octubre. Esta fiesta fue bautizada con la palabra gaélica de
“Samhain”. (El significado etimológico es “el final del verano“.) Esto es
porque durante esta celebración se despedían de Lugh, dios del Sol.
Esta festividad marcaba el momento en que los días se iban
haciendo más cortos y las noches más largas. Los celtas, al igual que muchas
culturas prehispánicas, creían que en Samhain los espíritus de los muertos
regresaban a visitar el mundo de los mortales.
El año céltico concluía el 31 de octubre, en el otoño, cuya característica principal es la caída de las hojas. Para ellos significaba el fin de la muerte o iniciación de una nueva vida. Esta enseñanza se propagó a través de los años de generación en generación.
La costumbre era dejar comida y dulces afuera de sus casas en manera de ofrenda. Por otro lado, era común encender velas para ayudar a las almas de los muertos a encontrar el camino hacia la luz y descanso junto a Lugh.
También durante la noche del 31 de octubre también se hacían
rituales. Estos tenían un carácter purificador para despedir el año.
Las raíces de Halloween no están realmente en Estados Unidos, sino en Reino Unido.
Con el auge del catolicismo, esta fiesta pagana se cristianizó, y comenzó a llamarse “La Víspera de Todos los Santos”. La traducción en inglés es, “All Hallow´s Eve”, de ahí nació la palabra “Halloween”.
La Iglesia católica instituyó como una de sus celebraciones
el "Día de todos los santos", en honor de los que "gozan de la
vida eterna en la presencia de Dios" y que no aparecen en santorales o no
se conoce su nombre.
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